La medida, que entró en vigencia el 15 de octubre, permitirá a los fiscalizadores del SII realizar acciones de fiscalización en cualquier domicilio fiscal de la Región Metropolitana, sin importar su ubicación en la dirección regional del fiscalizador.
El objetivo de la medida es mejorar la eficiencia de las fiscalizaciones y detectar posibles irregularidades tributarias.
La medida ha sido criticada por algunos sectores, quienes sostienen que podría vulnerar el derecho a la defensa de los contribuyentes.
El SII ha respondido que la medida se enmarca en la Ley Orgánica del Servicio de Impuestos Internos, que otorga al SII la facultad de fiscalizar a los contribuyentes en todo el territorio nacional.